El rescate por un equipo de buzos situados en la pequeña costa de la bahía, de dos embarcaciones que naufragaron frente a esas costas, “Nuestra Señora de la Luz” en 1752, y “Nuestra Señora del Buen Viaje” en 1789, dio origen al nombre del barrio.
El nombre deriva del apellido del poblador de Montevideo, Sebastián Carrasco, natural de Buenos Aires, soldado de la Compañía de Caballos Corazas del Capitán Martín José de Echauri
Dicha zona fue durante mucho tiempo propiedad del Cabildo de Montevideo, quien -con el fin de obtener recursos económicos- alquilaba parcelas y permitía la instalación de diversas actividades comerciales, como hornos de ladrillo, mataderos, tambos y otras actividades productivas.
La Historia de La Cruz de Carrasco (Montevideo, Uruguay), comienza allá por el año 1900 con la existencia de un camino de tierra, que une la Unión con el Paso Carrasco.
Su denominación se origina por la deformación del segundo nombre, del pionero del paraje.
Malvín Norte es un barrio que hasta comienzo de la década del 70 se conformaba mayoritariamente como zona de quintas. Actualmente se caracteriza por la presencia de muchos complejos habitacionales, cooperativas de viviendas, asentamientos precarios, así como zonas de casas bajas y enjardinadas.
El barrio Malvín Nuevo surge de la expansión territorial que se da de Malvín hacia el oeste, constituyéndose como un barrio integrado por características identitarias tanto de Buceo como de Malvín.
En sus orígenes, la costa de Punta Gorda fue zona saladeril y de embarque de piedras hacia Buenos Aires. Hoy se pueden ver los restos del muelle, al pie de la Plaza Virgilio, en la vertiente que mira hacia Malvín.
“La Unión es el recuerdo que dejó el Gral. Manuel Oribe en la época en que sus batallones abrazaban la cintura de la Nueva Troya; y desde octubre de 1851 en que cesó la sangría fraterna, es una entidad muy diferente a las demás que la rodean: un remanso a la orilla de la ciudad que nunca le pudo borrar su inocente aspecto de aldea romántica. Fue romancesca en idilios de reja y valiente en las sangrientas y turbias jugadas; tuvo los defectos de las grandes ciudades y los recios valores de los pequeños pueblos. Como no tenía galas para vestirse, se rodeó de molinos... Porque tiene su historia, casi le sobra leyenda y ni una ni otra dejaremos perder..."